viernes, 12 de enero de 2018

HUMO, FUEGO, HAMBRE


Habíamos esperado este momento. Sabíamos que cuando los nazis abandonasen la ciudad, ella quedaría sola, sin protección. Todo su dinero ganado, vendiendo a nuestras jóvenes camaradas para deleite de esos asesinos, ya no le iba a servir de nada. 

A pesar de su avanzada edad, la vieja aún mantenía una piel tersa y suave al tacto. Gritó un poco al principio, pero cuando mis dedos apretaron con fuerza su cuello, el espasmo de sus piernas señaló el final. En medio de la hoguera, hecha con los muebles del salón, palpitó su carne caliente entre mis manos. La ira logró saciarme el hambre, el frío y las ganas de venganza. Desde que comimos aquellas ratas del Volga, era el mejor bocado en meses.


Relato con el que participé en la 5ª Ronda, Pecado: LA IRA,
en el Concurso del Monstruoscopio 
de http://estanochetecuento.com/



2 comentarios:

  1. Santo cielo, Pilar, es tremendamente bueno!! (Aunque la bondad brille por su ausencia) puro fuego tus letras ;)

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    1. Manoli, este relato lo escribí para el concurso del Monstruoscopio, en el que llegué hasta la final. El escenario debía ser la guerra de Stalingrado, además cumplir otras condiciones como el personaje de la vieja rica, al igual que contener algunas palabras como humo y fuego, pero sobretodo debía de estar presente el pecado de la ira.
      Este relato fue mi propuesta.
      Me alegro que te haya gustado. Sé que es duro, pero nada comparado con lo que fue aquella cruel guerra.
      Mil gracias por pasar a leerme y dejar un comentario tan positivo para mi micro.
      Besos apretados.

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